ARAGÓN Y ESPAÑA SE QUEDA SIN PASTORES

Aragón y España se queda sin pastores y sin ovejas. No por culpa de los pastores, sino por culpa de los políticos mediocres y análfabetos en el sistema ganadero extensivo. Les han desprotegido de la cultura de pastar los montes quemados.

http://www.heraldo.es/noticias/aragon/2017/01/05/aragon-queda-sin-pastores-ganado-ovino-perdido-millon-cabezas-una-decada-1151724-300.html

La destrucción de pastores y ovejas se lleva desde los años 60 con la dictadura cuándo se empieza despoblando los pueblos. El  ICONA empieza a comprar pueblos. Primero, los pueblos que voluntariamente quieren vender para irse en busca de una vida mejor, Barcelona, Madrid, Valencia, etc., a las ciudades industrializadas. El resto de pueblos ganaderos como no se quieren ir, el Estado a través del ICONA les hace la vida imposible. Denuncias sin justificación alguna, por pastar sus ganados en zonas comunales, cuando toda la vida habían pastado alimentando  sus ganados. Se tienen que vender toda la ganadería  por las denuncias y la presión del  ICONA. Prohíben tajantemente el pastoreo de sus grandes rebaños en los montes Comunales y propios del Estado. 

A través de las denuncias de los forestales. Diciéndoles que las cabras hacían mucho daño a la vegetación pastando  sus ganados. Les obligaron, les mentalizaron,  de una manera u otra a vender sus propiedades sus ganados y sus pueblos. Teniendo que irse a vivir a otras ciudades.

Las cabras que eran las termitas que mantenían los montes limpios del sotobosque, con el apoyo de la ganadería ovina. El Estado a través del ICONA las elimina de un plumazo. 

Hoy el problema principal es las Autonomías y el Estado al no permitir pastar los montes quemados. Una política perversa de la administración para justificarse del catástrofe que cometen año tras año, gastando los presupuestos en una mala extinción en vez de una buena repoblación, dejando a los ganaderos sin monte para pastar sus rebaños. Así difícil mantener rebaños y pastores, con estas políticas premeditadamente preparadas para la exterminación de los ganaderos.