Una vez más voy hablar de
incendios forestales. Es una vergüenza lo que ésta pasando en España y en todo
el mundo desarrollado. Hoy le toca la
desgracia a Galícia y California. Estos señores que dirigen los incendios desde
las alturas del poder, ingenieros, directores generales, políticos y sus sagaces
pirómanos pagados, presuntamente deberían ser imputados juzgados y directamente
a la cárcel por delinquir con sus actos.
Ingenieros con sus lameculos apoyándolos
en sus escritos de las redes sociales. Humillándome por escribir un libro de
incendios forestales por no ser científico y ser un peligro hacia la población.
Pero sí es un libro práctico con la sabiduría
de muchos años. ¿Ahora quién es el peligro ustedes o yo? Ingenieros que
presumen de haber recorrido el mundo para aprender a hacer una correcta extinción
(claro, con dinero del contribuyente). Con tanta ciencia y saber según presumen
no vale para nada. Solo para llenar el sobre a final de mes. Demostrado esta
con los incendios de Galícia y California,
ardiendo premeditadamente hasta arruinar las poblaciones sin piedad y
con delitos de muerte de ciudadanos.
Los ciudadanos siempre serán víctimas
de estos desastres, hasta que el pueblo no despierte y se eche a las calles
para que haya un cambio de estrategia forestal y el fuego no sea un negocio
lucrativo.